Presentación a primarias

Os participo que he decidido presentar mi candidatura para concurrir al proceso de primarias de UPyD, que se celebrará el próximo 17 de Septiembre, para escoger al cabeza de la lista al Congreso de los Diputados por la Provincia de Barcelona. Desearía contar con vuestro apoyo en esta iniciativa.
Me ha llevado a tomar esta decisión la preocupación que siento desde hace años, y que cada día se me hace más angustiosa, sobre el futuro de nuestro país. Y, también, naturalmente, mi deseo de seguir participando en cimentar y desarrollar nuestro proyecto político, ahora desde el ámbito parlamentario.
No os voy a hablar de los problemas principales que a mi juicio presenta España; son de sobras conocidos por todos vosotros. Y también son conocidas por vosotros las respuestas que nuestro Partido tiene para los mismos. Pero sí quisiera hablaros de cuáles son las causas que nos han llevado hasta aquí y contra las que pondré todo mi empeño en luchar para su enmienda.
1. Escaso o nulo sentido de Estado, que ha provocado no sólo la llamada desafección nacional, sino lo más importante, un descontrol autonómico que repercute en que los ciudadanos no tengamos garantizados los mismos derechos y obligaciones en todos los rincones de España.
2. Crisis económica y situación de tragedia de niveles no vividos por muchos de nosotros, y que en España se han materializado con más crudeza, debido entre otras cosas, a una mala previsión y gestión gubernamental y al despilfarro que han ocasionado y ocasionan los entes autonómicos y locales, por sus políticas de endeudamiento y gasto incontrolado.
3. Percepción de un sistema judicial absolutamente politizado, que se mueve más por intereses partidistas que por asegurar a todos los españoles la defensa de sus derechos , la obligatoriedad de hacer cumplir a todos, los preceptos de la Constitución, máxima norma jurídica que ha de presidir nuestras actuaciones individuales, sociales e institucionales.
4. Falta de exigencia de responsabilidades individuales y colectivas ante las actuaciones negligentes o maliciosas de bastantes de nuestros representantes públicos.
5. Ley electoral injusta e incoherente, que permite que sean los partidos nacionalistas, con clara vocación secesionista, los que den estabilidad al gobierno central, mediante el chantaje permanente de sus pretensiones, que no buscan el bien para la mayoría, sino únicamente para unos pocos.
6. Convicción de que hace falta una importante reforma del Sistema Educativo, entendiendo la educación no únicamente como el período de Formación Inicial obligatoria o postobligatoria, sino añadiendo en este apartado el proceso de aprendizaje que se realiza durante toda la vida a nivel profesional y en educación no formal. Una reforma que se tiene que estructurar con sentido de Estado, que supera el ámbito de la educación y que ha de ser realizada adoptando medidas conjuntas con otros ministerios.
7. Ausencia de aplicación de criterios evaluativos en determinados aspectos de la gestión pública, lo cual ha posibilitado realizar actuaciones de elevado coste social y económico sin que se haya evaluado su pertinencia ni se haya acomodado su coste a las posibilidades económicas.
8. Implantación en España de políticas lingüísticas que coartan los derechos y libertades de muchos de sus habitantes, especialmente en Comunidades Autónomas con dos o más lenguas oficiales. Ello conlleva que muchos ciudadanos vean menospreciada institucionalmente la lengua oficial del estado, que tampoco la pueden escoger como lengua de aprendizaje, y que se vean imposibilitados en el libre movimiento por el territorio nacional en busca de diferentes ofertas de trabajo, debido a la necesidad de acreditación en la lengua oficial de la Comunidad, entre otras particularidades y coacciones propias de esas políticas lingüísticas que se ejercen ante la pasividad de los gobiernos centrales.
9. Sensación de impunidad que impera en buena parte de la sociedad. Se da por desaparecido el binomio acción-consecuencia; que, simplificando, vendría a decir: “se haga lo que se haga no pasa nada”. Pésimo ejemplo para nuestros jóvenes y por qué no decirlo, para muchos de nuestros adultos.
Pero, además, presento mi candidatura porque creo que algo puedo aportar al proyecto común. Modestamente, pero con absoluta convicción, creo que en mi trayectoria de trabajo se puede observar un gran activismo.
Me gusta trabajar y, sobre todo, me gusta trabajar con vosotros. Siempre he procurado mantener una actitud de cercanía, de diálogo y de colaboración con todos los compañeros. Espero haberlo conseguido. Seguiré con mi entrega, dedicación y ganas de trabajar, componentes de mi persona, que muchos de vosotros ya conocéis, y que hemos compartido en tantos momentos y circunstancias.
He sido responsable de Organización del Consejo Territorial de Cataluña de Marzo a Diciembre de 2010. Desde este pasado mes de Marzo soy responsable de organización de la gestora UPyD Cataluña, nombrada por el Consejo de Dirección. En el futuro seré lo que vosotros decidáis, pues sólo con vuestro apoyo puede prosperar mi candidatura.
Desconozco si otros compañeros presentarán su candidatura. En todo caso, estoy convencida de que la militancia de Barcelona debe participar y debe volcarse en este proceso de primarias para mostrar su implicación y para obtener unos representantes y unos resultados a la altura de la importancia y del papel que debe jugar UPyD en esta provincia, en Cataluña y en España.
No seré yo quien abone la idea de que tenemos pocas posibilidades de conseguir representación parlamentaria; al contrario, creo que la próxima contienda será la que nos confirmará como una alternativa necesaria en un escenario que nos lo quieren presentar como un páramo condenado a la esterilidad. Pero eso no es así y en nuestra mano está trabajar para demostrarlo.
Con vuestro soporte, si decidierais otorgármelo no me arredra afrontar el reto. Ni me ha sucedido en el pasado ni me ocurrirá en esta ocasión. Nadie se quema por presentarse a encabezar con su voz, con su imagen y con su ejemplo las ideas de un partido tan necesario y tan ilusionante como UPyD.
Creo firmemente que es muy importante obtener representación en el Parlamento Nacional. Es igualmente importante convencer a los ciudadanos de que nuestro voto, su voto, es útil, con o sin representación.
Ello indicará y hará saber a los partidos mayoritarios y a los partidos nacionalistas (que aspiran a cambiar cromos, como si de un patio del colegio se tratara) que cada vez somos más los ciudadanos anónimos, con perfiles profesionales y sociológicos diferentes, los que vamos a evaluar su actuación y a adoptar una posición activa en el futuro. Porque el futuro es de todos nosotros y lo hemos de construir sabedores de que vamos a vivir en él.
Espero tener ocasión de conoceros a todos personalmente, así como compartir y responder a vuestras inquietudes antes de que me otorguéis el apoyo y la confianza que os solicito.
Un fuerte abrazo